En la industria chilena, especialmente en los sectores de alimentos y bebidas, plásticos y químicos, el mantenimiento adecuado de los accionamientos eléctricos es crucial para prevenir fallos y asegurar una producción continua y eficiente. Estos sectores dependen de maquinaria compleja y procesos altamente automatizados, donde cualquier interrupción puede resultar en pérdidas significativas de producción y comprometer la seguridad y calidad del producto.
Problemas comunes en accionamientos eléctricos:
1. Interrupciones de Energía: Cortes totales de energía causados por factores externos como relámpagos o fallos en las líneas eléctricas.
-Detección: Instalación de sistemas de energía ininterrumpida para mantener la operatividad durante cortes breves.
2. Bajo Voltaje: Caídas de voltaje por debajo de lo normal, a menudo debido al arranque de maquinaria pesada o sobrecargas en la red.
-Detección: Monitoreo continuo de voltaje y utilización de alarmas para detectar caídas antes de que afecten el funcionamiento de los equipos.
3. Alto Voltaje: Incrementos en la tensión que pueden dañar equipos, comúnmente causados por relámpagos.
-Detección: Sistemas de protección contra sobretensiones para prevenir daños por picos de voltaje.
4. Ruido Eléctrico: Interferencias electromagnéticas que pueden causar errores en los dispositivos electrónicos y sistemas de control.
-Detección: Implementación de filtros de ruido y revisión periódica de la calidad del suministro eléctrico.
5. Variación de Frecuencia: Cambios en la frecuencia de la red que afectan el rendimiento de los equipos, especialmente aquellos sensibles a variaciones de frecuencia.
-Detección: Sistemas de monitoreo de frecuencia para ajustar o alertar sobre cambios significativos.
SHH, con más de 40 años de trayectoria y respaldada por certificaciones como Solution Partner de Siemens y Weg, es líder en proporcionar soluciones de mantenimiento en estos sectores críticos.
Su experiencia permite no solo reparar fallos, sino también anticipar y prevenir problemas antes de que ocurran, asegurando así la continuidad operacional y eficiencia en las plantas de producción. Esta capacidad de anticipación y respuesta rápida es vital en sectores donde la calidad y la continuidad de la producción son esenciales.